miércoles, julio 21, 2021

Los ojos de Octavio Paz me llamaron la atención mientras paseaba por la ciudad de Tordesillas

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Cuando voy viajando por las diferentes comunidades de España me encanta ir descubriendo aquellas huellas que de México y los mexicanos hay, tanto en sitios muy transitados como tambien en otros que muchas veces cuesta trabajo descubrir. Suena increíble, pero sólo es cuestión de estar atentos y, de pronto, nos vamos topando con muchas referencias que tienen que ver con nuestro país. Sin ir más lejos, hace pocos días visitando la ciudad de Tordesillas en la provincia de Valladolid, me topé con un imagen que me transportó inmediatamente a México.

Se trata de un magnífico mural pintado sobre la barda de un predio en el que se pueden ver unos ojos con una mirada especial que en seguida reconocí como los del Premio Nóbel mexicano Octavio Paz. Era inevitable que, no sólo me detuviera sino que, además, me acercara a contemplar los detalles. Arropado entre libros y letras —no podía ser de otra manera— el rostro amplificado del poeta estaba enmarcado por unos versos en los que se leía: "La poesía siembra ojos en las páginas. Siembra palabras en los ojos, los ojos hablan, las palabras miran. Las miradas piensan." Bonita imagen que acompaña al transeúnte en su caminar...

El mural, titulado "Las palabras que piensan", fue elaborado por el pintor zamorano Carlos Adeva en el año 2014, precisamente cuando tuvo lugar en Tordesillas el Año de México.

En el portal La vida en verso de la autora Soledad del Cañizo podemos leer el poema completo de Octavio Paz:
Decir, hacer
A Roman Jakobson

Entre lo que veo y digo,
Entre lo que digo y callo,
Entre lo que callo y sueño,
Entre lo que sueño y olvido
La poesía.
Se desliza entre el sí y el no:
dice
lo que callo,
calla
lo que digo,
sueña
lo que olvido.
No es un decir:
es un hacer.
Es un hacer
que es un decir.
La poesía
se dice y se oye:
es real.
Y apenas digo
es real,
se disipa.
¿Así es más real?
Idea palpable,
palabra
impalpable:
la poesía
va y viene
entre lo que es
y lo que no es.
Teje reflejos
y los desteje.
La poesía
siembra ojos en las páginas
siembra palabras en los ojos.
Los ojos hablan
las palabras miran,
las miradas piensan.
Oír
los pensamientos,
ver
lo que decimos
tocar

el cuerpo
de la idea.
Los ojos
se cierran
Las palabras se abren.

Prácticamente pegado al mural de Octavio Paz se encuentra otro, tambien pintado por Carlos Adeva, titulado "Hilos de unión" en el que se pueden ver a dos indígenas mexicanas rodeadas de tejidos que nos transportan inmediatamente a nuestro país.

Ambos murales sobre México estan ubicados en la calle de San Pedro, muy cerca de la Plaza Mayor de Tordesillas.

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