Lorenzo Zambrano Treviño habla para la prensa española

Con una mezcla de asombro, incredulidad, enojo e impotencia, los mexicanos que estamos fuera de nuestro país nos enteramos todos los días las terribles noticias que nos llegan de México en las que describen con lujo de detalles la injustificable sangría que el narcotráfico está ocasionando en nuestro lugar de origen.

Las noticias se suceden unas a otras y, por lo menos en los medios de España, pareciera que son el único tipo de noticias que se produce en México y por lo tanto las únicas dignas de reseñar.

Así las cosas, no hay día que en algún telediario no se mencione el más reciente tiroteo, la más sangrienta balacera o la más perversa emboscada que lo mismo da que suceda en Ciudad Juárez, Monterrey, Morelia o Tijuana por sólo mencionar las primeras ciudades que se me vienen a la mente.

Pero hoy ha sido diferente, en el periódico El País ha aparecido el la sección internacional, una entrevista con Lorenzo Zambrano Treviño, presidente de CEMEX —entre otras cosas— titulada "En México no vamos a permitir que se pierda Monterrey" en la que expresa importantes conceptos que valdría la pena revisar y analizar.

Luego de que al parecer el gobierno federal no ha podido contener la brutal escalada de violencia que las mafias de la droga están desarrollando en México, ahora es la iniciativa privada la que quiere tomar las riendas del problema y encontrar una solución efectiva y duradera para erradicar esta lacra social.

Zambrano Treviño expresa conceptos como: "Tenemos que rehacer la policía completamente. Hay que asumir que lo que hay no sirve. Tenemos soluciones para corto plazo que implican apoyarnos en Instituciones Mexicanas como el Ejercito y la Marina, que han demostrado su compromiso y eficacia -están llegando refuerzos de la Federación y unos 300 efectivos del Ejército van a funcionar como policías estatales-, pero el reto más difícil es a medio y largo plazo. Tenemos que crear una academia para formar policías que estén orgullosos de su profesión, que la sociedad civil los vea como protectores y no como asaltantes. Lo siguiente es involucrar a la ciudadanía. Que observe, que se coordine, que participe a través de las organizaciones y redes sociales. Que pase información de lo que está viendo y le parezca sospechoso, que se involucre, que denuncie -y para ello, claro está, necesitamos autoridades confiables-. Tenemos que formar ciudadanos. Estábamos dormidos, pero ahora estamos ocupados. Y yo le aseguro que Monterrey puede movilizarse muy rápidamente."

¿Será este el camino? ¿Podrán los empresarios promover una movilización ciudadana que contenga la violencia que se produce cotidianamente en México?

La verdad es que no lo sé, pero lo cierto es que necesitamos la participación de todos para que entre todos podamos liberarnos de éste cáncer.