jueves, enero 24, 2019

Preparar un plato de chilaquiles en España es fácil, rápido y, sobretodo, exquisito....mmmm!!!

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Debo de reconocer que de vez en cuando me entra el sentimiento y el apetito me dirige a elaborar algun platillo mexicano que sirva para calmar los antojos que de vez en cuando me asaltan. Afortunadamente en muchas ciudades de España podemos contar con tiendas que nos permiten adquirir muchos de los ingredientes necesarios para reproducir alguno de los platillos mexicanos que tanto nos gustan. Y como tenemos los ricos productos de La Reina de las Tortillas pues es muy facil hacer, por ejemplo, unos ricos chilaquiles que el día de hoy nos hemos preparado.

A nosotros especialmente nos gustan los chilaquiles verdes y por eso, además de las tortillas, compramos una lata de Salsa mexicana verde en el supermercado de El Corte Inglés, una cebolla, una buena cantidad de cilantro fresco y una lata de chiles jalapeños. También preparamos con antelación unos frijoles negros que puisimos en remojo.


Los pasos que seguimos para hacer los chilaqules fueron:
  • Por un lado cortamos las tortillas en triángulos y las freímos en aceite de girasol hasta que estuvieran duras y con un color dorado atractivo. Las ponemos luego sobre una servilleta para que absorba el exceso de grasa.
  • Por otro lado, en un vaso pusimos la salsa mexicana verde, la cebolla y una buena cantidad de cilantro, preferentemente las hojas. Lo molimos perfectamente y le añadimos chile jalapeño al gusto segun el picante que quisieran tener.
  • En un olla express ponemos los frijoles con una cebolla, un diente de ajo, sal y si pueden conseguir epazote, le echan uns ramas. Lo dejan un buen rato hasta que esten los frijoles totalmente cocidos.
  • Una vez cocidos, los frijoles se escurren  para que, lo más secos posibles se pongan en una sartén con aceite de girasol y se aplasten para, formando una especie de pasta, hacerlos refritos.
  • En otra sarten ponemos un poco de aceite de girasol y, una vez caliente, le añadimos el contenido del vaso con la salsa, para freirlo y corregimos el punto de sal.
  • Cuando esté caliente la salsa se le añaden las tortillas fritas. A nosotros nos gustan que las tortillas se queden duritas por lo que sólo las pasamos un poco por la salsa y las quitamos.
  • Se sirven en un plato con una generosa porción de frijoles refritos y si desean se les puede añadir queso rallado  y un chorro de crema líquida (nata) para decorar.
Realmente nos quedaron muy ricos  y es un patillo que se puede hacer muy facilmente. Son este tipo de placeres gastronómicos los que alegran el día a día y, sobretodo, los que mantienen el vínculo con nuestro país, aun estando a muchos kilómetros de distancia.

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