En sus poemas, Gabriela Sotomayor lanza un grito a las amas de casa, "a las que no saben cocinar, a las que se les quema la comida que envenenan, a las que no tienen sazón, ni perdón de Dios". Durante su vida en San Antonio, Tejas, Gabriela Sotomayor, periodista de profesión, ante la falta de servicio doméstico, muy costoso en los EE UU, se vio obligada a enfrentarse a las faenas propias del ama de casa. Las labores domésticas, "el quehacer" de la casa constituían para ella "una verdadera friega, una faena horrible que haces y nadie te reconoce". Ante tal situación, encontró una luminosa salida "cocinando versos" con los cuales formó su poemario "Llamado Urgente"
Y para mostrarnos un poco de ese mundo que Gabriela fue describiendo mientras se afanaba a las labores domésticas transcribimos uno de los poemas que integran éste libro:
AMA DE CASA
Aquí soy la dueña,
reina por un día,
sierva de por vida.
Soy la soberana de mi tierra,
en mis dominios reales
no entra nadie
sin pedir permiso,
sin identificación,
ni contraseña.
En mis dominios imaginarios,
entra cualquiera.
Mi territorio
es mi destino,
yo vigilo que se cocinen
los sueños,
que se horneen los planes,
que las almas se llenen de postre
y puedan salir a pasear.
Soy la que controla las raciones
de verdad,
la que reparte el pan y los besos,
la que barre los despojos.
Soy la mera, mera,
la que ahoga el desahogo,
la que grita sin decir nada.
Yo decido qué va con qué
y quién sí con quién no,
yo soy la que apruebo,
la que pruebo,
y la que repruebo.
Soy la que ostenta la bandera
de la paz,
la que sirve el vino de honor,
la que marca la hora del amor.
Aquí mando yo,
les guste o no
y para que quede bien claro
de una vez por todas,
aquí soy yo la que tiene
la última palabra,
¿oyeron?
la última palabra.
Aquí soy la dueña,
reina por un día,
sierva de por vida.
Soy la soberana de mi tierra,
en mis dominios reales
no entra nadie
sin pedir permiso,
sin identificación,
ni contraseña.
En mis dominios imaginarios,
entra cualquiera.
Mi territorio
es mi destino,
yo vigilo que se cocinen
los sueños,
que se horneen los planes,
que las almas se llenen de postre
y puedan salir a pasear.
Soy la que controla las raciones
de verdad,
la que reparte el pan y los besos,
la que barre los despojos.
Soy la mera, mera,
la que ahoga el desahogo,
la que grita sin decir nada.
Yo decido qué va con qué
y quién sí con quién no,
yo soy la que apruebo,
la que pruebo,
y la que repruebo.
Soy la que ostenta la bandera
de la paz,
la que sirve el vino de honor,
la que marca la hora del amor.
Aquí mando yo,
les guste o no
y para que quede bien claro
de una vez por todas,
aquí soy yo la que tiene
la última palabra,
¿oyeron?
la última palabra.
La presentación estará a cargo de Noni Benegas, poeta y antóloga y José Tono Martínez, escritor y poeta.
Jueves 6 de marzo, a las 19:00 horas
Instituto de México
Carrera de San Jerónimo, 46
Telf: 91 420 29 92
Instituto de México
Carrera de San Jerónimo, 46
Telf: 91 420 29 92
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