En días pasados tuve conocimiento de una noticia que me llamó mucho la atención y que hasta ahora tengo tiempo de comentarla con más calma: la película mexicana "Temporada de Patos" arrasó practicamente en la reciente entrega de los Premios Ariel (el equivalente mexicano a los Goya españoles) obteniendo 11 de las doce estatuillas por las que estaba nominada la película.
Sin embargo hoy, mientras estaba buscando el material para la redacción de este comentario, me entero de que la película de Fernando Eimbcke recibió ayer el premio especial del jurado en el Festival París Ile-de-France.
La verdad me he quedado desconcertado y súmamente preocupado por, lo que yo me imagino, debe ser el estado actual del cine mexicano.
Me explico:
Hace un par de meses tuve la oportunidad de ver la mencionada película en la Cinemateca de Málaga durante las escasas dos semanas que duró su exhibición. Tomando en cuenta la poca promoción que se le hizo en esta ciudad española y de que, además, desde hace tiempo se habla poco (y por ende nos llega muy poco material) de cine mexicano actual, el público asistente a la sala el día que fuimos a verla era bastante escaso (acaso dos o tres parejas).
Yo salí con una mezcla de opiniónes encontradas, porque si bien es cierto que el planteamiento de la historia es original, el tratamiento bicolor de la película resalta su mensaje y la edición contribuye a resaltar el riitmo de aburrimiento de sus personajes; en conjunto, es una pelicula sin muchas pretensiones, sin un planteamiento cinematográfico novedoso y, por encima de todo, sin unas actuaciones convincentes ni logradas (el hecho de que sean todos actores amateurs no debería restar un buen trabajo de dirección e interpretación).
Ya sé que desde ahora muchos de mis lectores mexicanos dirán que soy "malinchista" o que soy muy "exigente" con el trabajo de los mexicanos, pero nada lejos de la realidad. Simplemente resulta de que me pareció una película simpática y hasta graciosa, pero sin ninguna otra cosa más.
El crítico Diego Galán en su columna "Camara Oculta" del diaro El Pais del 1º de abril del 2005 y que tiula "México Lindo" me confirma el hecho de que la película pasó "por algunas pantallas españolas con más pena que gloria."
Ahora, que semanas despues de haberla visto, me entero de que convirtió por unanimidad en la gran ganadora de los premios Ariel del Cine Mexicano e, incluso en Francia, le reconocen sus méritos en la dirección, me quedo totalmente desconcertado puesto que mis consideraciones estéticas evidantemente no tienen nada que ver con la opinión de los miembros de la Academia mexicana de Cine y de los Miembros del jurado del mencionado Festival, aunque de entrada me da muchísimo gusto de que el talento mexicano se premie dentro y fuera de nuestro país.
Sigo insistiendo de que es una pelicula simpática, original e interesante pero con muchas carencias y defectos que la alejan, para mi gusto, de ser una cinta multipremiada.
Y yo me pregunto entonces: ¿si ésta es la película que arrasó en los "arieles", como estarían las demás que compitieron tambien?
Lo que sí es cierto, al margen de estas disquisiciones personales, es que nos hace falta que el cine mexicano se exhiba en España: estamos sedientos de ver lo que actualmente se hace en nuestro país.
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